Redacción
Martes, 08 de Abril de 2025
BRUSELAS
Auditores de la UE denuncian la falta de transparencia en la financiación comunitaria de las ONG

Un informe de los auditores del Tribunal de Cuentas de la UE ha puesto de manifiesto una problemática significativa en la gestión y supervisión de los fondos que la Unión Europea destina a las ONG.
Según los auditores, la falta de transparencia, precisión y completitud en la información sobre esta financiación genera serias dudas sobre su uso y distribución. La crítica principal se centra en la Comisión Europea, a la que se reprocha no haber implementado controles efectivos para asegurar que las ONG beneficiarias respeten los valores fundamentales de la UE, lo que podría derivar en un daño reputacional para el bloque.
El hecho de que la información se publique de manera fragmentada complica aún más el panorama: no solo dificulta el seguimiento de los fondos, sino que también impide determinar si existe una concentración excesiva de recursos en unas pocas organizaciones o evaluar plenamente el impacto de las ONG en las políticas comunitarias. Entre 2021 y 2023, se destinaron 7.400 millones de euros a ONG en áreas clave como cohesión, investigación, migración y medio ambiente, pero la falta de datos claros y fiables lleva a los auditores a recomendar cautela al interpretar estas cifras.
Además, el informe llega en un momento delicado, justo después de que la Comisión admitiera haber financiado actividades de lobbying a través del programa LIFE, lo que refuerza las preocupaciones sobre la supervisión de estos fondos. Aunque la Comisión asegura haber tomado medidas para evitar que esto se repita, la auditora Laima Andrikiene subraya que, pese a ciertos avances, el sistema sigue siendo "confuso" y poco fiable. Esto pone en cuestión la credibilidad del proceso de participación de las ONG en las políticas de la UE, un aspecto que, según los auditores, depende intrínsecamente de la transparencia.
En resumen, el Tribunal de Cuentas llama a una reforma urgente en la gestión y reporte de estos fondos para garantizar que sean utilizados de manera adecuada y alineada con los principios de la UE, al tiempo que se protege la imagen y la confianza en las instituciones comunitarias.